D. XXXII T.O. (A) Mt. 25,113. 12 de noviembre de 2023

Las doncellas de la parábola no estaban preparadas para la llegada del esposo.

Cuando nos acercamos al tiempo del Adviento, ya resuena el conocido poema de Rabindranath Tagore, “él viene, viene siempre” … El Señor llega en todo momento y hay que tener los ojos, el corazón, la mirada, el pensamiento… preparados para leer la realidad, los signos de los tiempos, y responder a su llegada.

La comunidad cristiana no puede ser una comunidad ciega, una comunidad pasiva, una comunidad rutinaria, una comunidad anestesiada. Y para ello es necesario llenar las “alcuzas” con el aceite de la formación, de la inquietud, de la permanente renovación y adaptación al cambio y a los signos de los tiempos.

Don Tomás Priego Martínez.

Sacerdote del Centro de Hermandades del Trabajo-Madrid.