Evangelio 5 de marzo: Convertíos y creed en el evangelio

Miér. de ceniza: Joel 2,12-18; 2 Cor 5,20 – 6,2; Mt 6,1-6. 16-18

Limosna sí, con justicia, no para buscar la honra humana ni menos aún para justificar formas escandalosas de vida. Oración sí, con honestidad, no como una pose de falsa piedad o para querer construir una falsa existencia ante Dios. Ayuno sí, poniendo las cosas en su sitio, adorando solo a Dios y no a los ídolos; ayuno de todo lo que es inhumano y de todo lo que Dios no quiere en su proyecto de amor.

No aparentéis, no llevéis doble vida, no busquéis el reconocimiento de la gente, no seáis falsos, no hagáis de un gesto de reconocimiento al Dios de la misericordia, una propaganda de vosotros mismos y de vuestras virtudes. Jesús no pide derribar los tres pilares, sino darles su justa medida y su significado apropiado que toma su luz en el evangelio.

La Cuaresma nos ofrece el ayuno para conocernos mejor nosotros mismos, la limosna para reconocer a los demás, y la oración para acercarnos a Dios.

Javier Prat Cambra

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *